Salsa de tomate casera

 
Esta salsa es muy socorrida a la hora de sacarte de un apuro, normalmente compro la lata de tomate triturado, que ya viene sin semillas ni piel, y la preparo al completo, la que no utilizo en el momento la conservo en un frasco de vidrio para cualquier otra ocasión, se mantiene muy bien cerrada al vacío. Recuerdo siempre un concejo de una amiga llamada Dulce Yunis, me dijo que cuando preparara la salsa de tomate el punto principal es dejarla cocinar a fuego medio y cuando el aceite se le note arriba en la superficie, entonces estará lista, y desde entonces siempre la elaboro así, lleva su tiempo, pero merece la pena.
Salsa de tomate cacera / Fue un día como hoy
Salsa de tomate secándose
INGREDIENTES:
  • 4 kilos de tomates bien maduros, (yo uso normalmente tomate perita o de rama, pero el que mejor tenga va bien) ó 1 lata de 4 de kilos de tomates triturados.
  • 3 cucharadas de aceite.
  • 1 cucharada de albahaca.
  • 2 hojas de laurel.
  • 1 cucharada de sal gorda.
  • Frascos de vidrios esterilizados para conservar la salsa.
PREPARACIÓN:
  • Lava los tomates y tritura bien o corta muy pequeños, hay quien les quita las semillas y piel. 
  • Coloca una olla a calentar con el aceite
  • Vierte el tomate ya triturado,  el laurel, el orégano.
  • Pon a punto de sal como te guste, yo coloco 1 cucharada.
  • Cocina a fuego medio con la tapa de la olla, de vez en cuando remueve y vuelve a tapar. (retira de la cocina, destapa, remueve y  vuelve a colocar en la cocina con la tapa).
  • Cuando veas el aceite encima del tomate y la consistencia que te agrade estará lista, a mi me gusta que quede bien espesa.
  • Rectifica de sal cuando este casi espesa, no añadas más sal de la necesaria al principio, porque a pesar que se ve mucho tomate, éste se reducirá a la mitad y puede quedar salado.
Nota:
Envasar al vacío:
Esteriliza primero los frascos, coloca los envases dentro de una cacerola con agua hirviendo unos veinte minutos junto con sus tapas.

Deja en la cacerola pasado el tiempo, escurre cada frasco y cada tapa. La mejor manera es colocar cada frasco boca abajo sobre una rejilla.

Cuando la salsa esté lista, vierte en caliente la salsa en cada frasco, tapa bien y coloca  los frascos bien tapados dentro de una olla con agua caliente, (colocas un trapo de cocina entre los frascos para que no choquen) y lo dejas cocinar treinta minutos. Estos frascos son pequeños, sirven para envasar 140 gr.

Pasado el tiempo apaga el fuego y los dejas enfriar dentro de la cacerola con el agua.

Cuando estén fríos, los secas y guardas en tu despensa. 
De esta manera se conservarán muy bien varias semanas o meses.
O bien los envasas y los congelas cuando estén fríos, retirando con tiempo cuando los necesites para que se descongele.
Subir a Inicio

Entradas populares de este blog

La sal gruesa y la sal fina, beneficios y diferencias

Setas con guisantes

Pisillo de atún